Tratamiento de suelos

Son tratamientos diferentes y es muy importante hacer una valoración técnica del suelo, para saber cual es el tratamiento indicado en cada momento. Los suelos que normalmente tratamos son granito, terrazo y mármol.

El pulido se puede emplear en obra nueva o cuando el suelo está muy deteriorado, es un proceso que consiste en varias actuaciones.

El disco de diamante lo llevamos al cabo cuando el suelo está en mal estado, pero no necesariamente tiene que ser pulido, es una técnica que se emplea con discos de diamante, evita tener que desalojar completamente el habitáculo, con lo cual, es un procedimiento que viene muy bien en oficinas, viviendas particulares..etc.

Abrillantado o cristalizado es el mantenimiento y acabado que tienen estos suelos después de un pulido o disco de diamante, la frecuencia de este va en función del tránsito y desgaste de cada estancia, debido a la acumulación de suciedad y el uso, el brillo se va perdiendo de forma absolutamente irremediable.

Es importante realizarlo con la frecuencia que necesite cada suelo, para evitar llegar a tratamientos más costoso y engorrosos, como pueden ser los dos descritos anteriormente.